Históricamente, las ecografías 2D eran aquellas en las que se observaba una imagen plana de dos dimensiones, en alto y largo. Posteriormente surgieron las ecografías 3D en las cuales se podía mostrar la figura del bebé en las 3 dimensiones del espacio. Con la llegada de las ecografías 4D, se añadió el tiempo, de manera que podíamos ver un vídeo del bebé en 3 dimensiones y en movimiento.

Posteriormente surgieron las ecografías 5D y 6D, donde al vídeo del bebé se añaden imágenes tratadas con sombras que lo hacen aún más real. La ecografía 6D es la imagen mejorada de la ecografía 4D. Las imágenes que se obtienen son de mayor resolución y mayor nitidez resultando en un aspecto más real del rostro del bebé.

La ecografía HD-Live es la ecografía con mayor precisión que se realiza en la actualidad. Cuenta con una mayor iluminación (luz artificial y virtual) para poder ver las imágenes con más nitidez y claridad. Además, es la primera que usa Inteligencia Artificial. Las imágenes son tan reales, que parecen que hubiera una cámara dentro del vientre materno.

La ecografía HD-Live se puede realizar desde el primer trimestre del embarazo, pero si deseas conocer el rostro de tu bebé tal cual será al momento de nacer, te recomendamos este estudio entre la semana 24 y 32, ya que el tamaño de tu bebé es el ideal para apreciar sus facciones. A partir de las 32 semanas disminuye progresivamente el líquido amniótico y el bebé continúa su crecimiento por lo que cada vez tiene menos espacio para poder visualizarlo, sin embargo podemos intentarlo y muchas veces conseguirlo como se muestra en las siguientes imágenes: